Francia-Alemania-Bélgica 2011 90 min.
Guión y dirección Marjane Satrapi y Vincent Paronnaud, según la novela gráfica de la primera Fotografía Christophe Beaucarne Música Olivier Bernet Intérpretes Mathieu Amalric, Edoard Baer, Maria de Medeiros, Golshifteh Farahani, Eric Caravaca, Chiara Mastroianni, Isabella Rossellini, Enna Ballano, Mathis Bour, Didier Flamand, Jamel Debbouze Estreno en España 3 de agosto de 2012
Ocurre a menudo que tras un éxito fulgurante e inesperado con una película humilde, sus responsables logran el respaldo de la industria para con más recursos hacer otra con la que convalidar el éxito, y sin embargo fracasan en el intento. Es éste el caso de los autores gráficos Marjane Satrapi y Vincent Paronnaud, que tras triunfar en todo el mundo con Persépolis, un alegato contra el trato discriminatorio a la mujer en la cultura islamista realizado con una curiosa y original técnica de animación, nos ofrecen ahora una insulsa y muy pretenciosa historia de amor ambientada en Teherán en los años 50. Haciendo uso de una estética muy elaborada, combinando diversos recursos formales y un uso exuberante del color y la puesta en escena, animación incluida, esta triste crónica de amor imposible entre un violinista (Amalric) y una preciosa joven (Farahani, a quien hemos visto tanto en producciones internacionales, como Red de mentiras de Ridley Scott, como en películas iraníes, como A propósito de Elly de Asghar Farhadi), a los que el destino les deparará dramáticas consecuencias. Ni su magnífico reparto, ni esa preciosista puesta en escena, ni una elaborada banda sonora en cuyos solos de violín podemos escuchar a Renaud Capuçon, frecuentemente programado en nuestro Teatro de la Maestranza, consiguen atrapar a un espectador desinteresado por la trama, por mucho artificio que contenga su estructura narrativa para intrigar y lograr la atención del sufrido público. Un paso en falso de este tándem de realizadores que esperamos puedan superar pronto.
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